PARTE IX

Al estar frente a ella controló como pudo ese temblor interno, le tomó la mano con las dos de él, como abrigando todo su cuerpo, después supo que ese gesto al saludar hizo en ella un efecto de enamoramiento instantáneo, y le dijo, hola bonita, que bueno que estás aquí...
Ella a pesar de querer dominarse no lo lograba, tenía un pequeño temblor alrededor de su boca, cosa que fue calmando el nerviosismo natural de él...
Pues aquí estamos guapo, mi nombre es Laura...
Hola, yo me llamo Andrés, mira, esta es mi tarjeta de presentación, ahi tienes los números de teléfonos, particular, oficina y el de los mensajes por si hay algo urgente...
Que bien, gracias, yo no te doy el número particular por obvias razones y en el trabajo no tenemos acceso al teléfono de la oficina, ya que la Directora es la "dueña" del mismo, pero sé que seguiremos en contacto más cercano, estaba revisando que este tipo de eventos se dan como 10 veces al año, y ahora que te conozco, aprovecharé para asistir a ellos.
Bueno, ojalá que yo tenga el tiempo de poder estar en los lugares que visites, ya que realmente la primera impresión que has causado en mi, me gustó enormemente...
Pues lo mismo te digo, que estás tomando?
Un ron con refresco de cola...
Muy bien es mi bebida preferida...
La charla se fue por diferentes partes, familia, escuelas, novias y novios, mejores amigos, entretenimientos, problemáticas anteriores y por supuesto lo actual, entrelazaron los momentos de tal forma que llegó un instante en que parecía que esa no era la primera cita, sino un par de viejos amigos que volvían a reencontrarse después de muchos años de no verse, hasta que ella mencionó que era necesario hacer algunas asistencias a diferentes charlas del congreso con el objeto de obtener la certificación del evento, ya que tendría que presentarlo en su trabajo pero sobre todo, a su marido.
Convinieron en que se verían a la hora de la cena, mientras él iría a dar una vuelta por algún lugar de ese puerto...
Se sentía felíz, muy contento, realmente le gustaba ese encuentro, una charla amena con una linda mujer, no solamente en el exterior, a pesar de tantos problemas con el esposo pero se notaba que era una persona que necesitaba, incluso que le urgía vivir plenamente, y no podía, le mencionó que ya le había pedido en algunas ocasiones el divorcio, pero que le dijo que nunca se lo daría, ya que la consideraba como una especie de talismán, con razón ella de idiota o de imbécil no lo bajaba, lo que hizo que en un momento él se pusiera algo tenso fue cuando ella, de cierta forma en broma pero también en serio mencionó que si de casualidad no conocía a alguien que pudiera desaparecer al individuo, caray, cuanto rencor estaba abrigado en esa mujer, solamente le contestó que tuviera más paciencia, que estaba seguro de que todo se solucionaría de manera positiva.