Los 3 Reyes Magos.

Era de mañana, ella caminaba de prisa, de un lado para el otro, el pequeño que iba tomado de su mano solo se percataba de que caminaban unas calles, se detenía y volvía sobre sus pasos, buscaba algo, pero no sabía ni que era, y lógicamente el niño, menos, si, eran madre e hijo, tal vez él tendría 9 años o uno menos, y así siguieron por un rato, pero no se podía protestar, así era ella, cuando iban al mercado hacía lo mismo, preguntaba en un puesto, se iba a varios más y terminaba comprando en el primero, cuando él le decía, mamá, este fue el primer puesto donde preguntó, y ella lo negaba rotundamente, uff.
La caminata de esa mañana se hizo eterna, al chamaco ya le dolían sus pies, pero no protestaba, no fuera que se llevara un coscorrón, porque eso pasaba muy seguido.
Llegó un momento en que lla se detuvo y le dijo..."hijo, ando buscando tu regalo de Reyes, pero no encuentro nada que pueda comprar con lo que traigo, y lo barato es muy corriente".
El niño no supo que hacer, tal vez hubiese preferido recibir 100 coscorrones pero no la confirmación de lo que se negaba a creer!!!, los papás son los Reyes Magos.
Hoy en día, mi hija de 11 años, aún tiene la creencia de que los Reyes Magos vienen cada año a dejarle sus juguetes, ya llegará el día adecuado para que sepa la verdad, pero saben?, yo aún tengo la certeza de que al poner esos juguetes junto al Nacimiento donde está el árbol de Navidad
me siento un Rey, Mamá, tu eres mi Reina Maga junto con mi Papá, sé muy bien el enorme esfuerzo que hacían para llevar algún dulce o juguete a siete hijos, por eso, esa noche somo 3 los Reyes Magos, ustedes dos y yo, gracias por todo.

Que tiempos aquellos en que una erección era algo tan cotidiano...

El calor no impide que mi pensamiento deje de fluir hacia tu persona
te pienso, te recuerdo, te siento, y dentro de muy poco
estarás a mi lado, por el momento pido que los días pasen rápido
pero en cuanto estemos juntos, haré todo lo posible por detener
el paso de las horas, te espera mi cuerpo, mi alma, mi espíritu, simplemente...
te espero.

PARTE XX Y FINAL....

Andrés salió en su automóvil, sabía bien que ya no podía echarse para atrás aunque es lo que realmente quería, el motivo central de ese cambio se había transformado, hacía días que no sabía nada de Laura, lógico, no le quería dar la cara, en lugar de ir felíz se encontraba hasta enfermo, así se sentía, algo extraño bullía en su cuerpo, nadie sabía por lo que estaba pasando realmente pero ahora tenía que ir a cumplir con su compromiso laboral, no se había detenido a pensar que iba a un ambiente que no era el suyo en realidad, pero como iba a saber que las cosas iban a dar ese giro tan repentino para él ?.

Fue manejando como un autómata, se detenía en las gasolineras cuando era necesario, pensando y pensando, recordando cada uno de los momentos que pasó con ella, recordó cuando fue a un compejo turístico porque contaba con una membresía, pero iba con sus dos hijas, y Andrés las alcanzó hasta allá, y se iba a pasar el día con las tres, las niñas lo querían mucho y él a ellas las trataba como las hijas que nunca tuvo, por las noches ella se arreglaba y Andrés pasaba en el auto rentado por ella y se iban a trasnochar y luego a la habitación del hotel donde él se hospedaba, la segunda ocasión que se vieron en otro lugar con playa, ella ya iba sola, el pasaba algo de crisis y consiguió un cuarto más sencillo, eso a ella no le importó, lo que quería era estar con Andrés, quince días juntos, nunca habían estado tanto tiempo así y nunca volvieron a estarlo.

Recordó incluso que ella en alguna ocasión le llegó a comentar que iba a pedir un cambio de adscripción para irse a la ciudad y poder estar juntos más tiempo.

Recordó que Laura le decía que era el amor de su vida, cuanto sarcasmo le presentaba ahora la vida misma, como era posible que a "un amor de la vida" le pudieran hacer eso?.

Se sonreía de sus ocurrencias, pero después se daba cuenta de lo estúpido que era todo, que hacer para poder enfrentar y afrontar todo eso?, tendría el valor de ir a buscarla en cuanto llegara, o ella se acercaría?.

En que momento la perdí?

Que no hice bien?

Siempre le he profesado tanto amor, tantos cuidados, que pasó?

Alguna vez tendrán respuesta las interrogantes?

Ni siquiera se atrevía a decir nada, ni a sus propios "amigos", la amistad no tenía significado porque a pesar de tener muchas relaciones por el trabajo, se daba cuenta de que realmente no tenía amistades sinceras, que la misma Laura fue quien ocupaba ese lugar y ahora, ahora ni eso tenía.
Donde había perdido el rumbo, en que momento dejó de existir para el resto de la humanidad o viceversa, estaba tan absorto en su trabajo, a su misma familia les había negado su presencia, solo iba en muy contadas ocasiones a verlos, sus sobrinos ya no eran los ejes centrales de su vida, todo eso lo había cambiado por "estar" al pendiente de una persona, cuanto transformaba a un ser humano ese sentimiento que Andrés padecía, si, asi lo llegó a pensar, el amor, lo padecía porque ahora se le figuraba como una especie de cáncer, algo que traía impregnado a su piel, que salía por sus poros, pero se estaba transmutando en sentimientos que debía reconocer como parte de la enfermedad.
La desconfianza era lo primero, se hacía preguntas...desde cuando había empezado esto, para tomar la decisión de unirse a alguien, tendría que haber pasado un tiempo largo, luego entonces, desde cuando?.
El miedo, que haría Andrés sin Laura, en un momento dado ella significaba todo por lo que estaba haciendo lo que hacía, quien sería el motor de su vida a partir de ya?.
El odio, acaso podría sentir eso por ella?, no podía concebirlo pero si estaba sucediendo, de repente los recuerdos se agolpaban uno tras otro que no podía comprender esa actitud de ella, la falta de franqueza, de seriedad, de cosideración hacia él, si al menos alguna vez Andrés hubiese maltratado de alguna manera a Laura, comprendería que ella buscara a alguien más, pero siempre estuvo al pendiente incluso de ciertas necesidades, y el odio aparecía con su manto obscuro a tratar de rodearlo, y Andrés terminaba por apartar de su mente ese inicio de rencor, se daba cuenta de que no, eso no quería sentirlo...
Después de diez horas de camino, llegó al anochecer, ya lo esperaban en la casa, las cosas que había ordenado para el espacio donde él estaría, estaban ya colocadas y funcionando todo, le ayudaron a bajar sus pertenencias, y se retiraron, buenas personas, pero casi ni hablaron, ya lo conocían y lo notaron muy extraño, sin embargo no le comentaron nada, tal vez era por el cansancio del viaje, Andrés se dio un baño y se disponía a acostarse, pero decidió ir a dar una vuelta, al otro día sería sábado y no laboraría, subió a su auto y salió sin un rumbo fijo, al menos eso pensaba o no lo pensaba, el caso es que casi al llegar por cierto rumbo, se percató que estaba muy cerca de donde vivía Laura, uno de sus recuerdos vino de inmediato, cuando ella aún era casada y charlaban en el chat, le dijo, alguna vez estarás en este sofá donde yo me siento, y me harás el amor incansablemente, y si, eso pasó, hacía unos meses tan solo...
Se aparcó casi enfrente del edificio, su camioneta estaba guardada en el lugar que le correspondía, eso significaba que estaba en casa, se dirigió a un teléfono público y le llamó...
Contestó la pequeñita, la saludó y le pidió que la comunicara con su mamá, tardó un poco pero escuchó su voz...
Andrés?...
Si, como estás Laura?
Pues bien, gracias, y tú?
Podría estar mejor, pero porqué no sales un momento y nos vamos a tomar un café, ya estoy aquí...
Ya?, que pronto...
Pues te había comentado que eran 15 días, pero tal vez lo olvidaste como desde la última vez que chateamos pasó ese tiempo...
Bueno, pero entonces ese café será mañana, hoy me siento cansada...
Bien, como digas, mañana te llamo...
Al otro día le llamó pero le dijeron que no estaba, al siguiente lo mismo, y lo intentó al otro día y nada...
Andrés tomó la decisión de no llamarle de nuevo, y empezó a dedicarse a su trabajo, era lo mejor, total si así estaban las cosas él ya nada podría hacer, pasó un mes y de repente en la oficina le dijeron que tenía una llamada...
Hola?...
Andrés, hola...
Laura?...
Si, es que ya no has llamado...
Si llamé, pero no pudiste atenderme...
Disculpa, he estado algo ocupada, mira, hoy por la noche pasaré por ti en mi camioneta y nos vamos a tomar ese café, te parece?...
Andrés estuvo a punto de decirle que ya no quería verla más, que siguiera con sus proyectos, que ya no la amaba, que no le importaba, que la odiaba....
Si, claro, dime la hora y te estaré esperando...
Eran las 9 de la noche, viernes otra vez, la esperó solo unos cuantos minutos pero al fin la veía nuevamente, subió a la camioneta, se saludaron, y empezaron a charlar, el auto estaba encendido pero no se ponía en marcha, se notaban nerviosos, inquietos, se miraron a los ojos, el la abrazó, ella le correspondió, le dijo, bésame y así empezó todo, fueron a un hotel y pasaron la noche juntos, como hacía muchos días que no estaban...
Salieron del hotel, estaba empezando a amanecer, no hablaron de nada más, simplemente recordaron viejos tiempos, el tema central no se tocó, para Andrés todo volvía a la "normalidad", pensó que tal vez lo de la boda se canceló, quien sabe, no quería preguntar...
Iban saliendo por las calles, tenían que encaminarse a la carretera para regresar a la ciudad, ella mencionó el tema, le dijo, tendremos que tener cuidado, ahora soy una mujer comprometida y pues no estaría bien que mis hijas se den cuenta que hay algo entre tu y yo, ellas ya conocen a mi novio oficial, así como gran parte de mi familia, mi padre, hermanos y hermanas, en fin, quienes deben de conocerlo...
Andrés no sabía que decir, bullía en su cuerpo una efervecencia, sentimientos encontrados, tenía ganas de decirle que se detuviera y bajarse y regresar a pie, pero no se atrevió, soLo guardó silencio, estaban ya a la orilla de la autopista, y Andrés solo preguntó...
Porqué y cuando sucedió esto?...
Ella volvió su vista hacia Andrés acelerando la camioneta, le iba a contestar algo, pero todo pasó en una fracción de segundo, un camión de voltéo cuyo chofer iba muy cansado manejando, se quedó dormido al volante de su máquina y arrolló la camioneta de Laura, el duro golpe la impulsó hacia Andrés, el la abrazó, y así fue dando vueltas la camioneta, ellos salieron volando y en un acto reflejo no la soltó de la mano, al caer al piso, ambos estaban muertos, pero asidos, tal vez como era el destino de ambos...
Las circunstancias los llevaron a una relación que ambos disfrutaron, ella cambió en cierto momento, él no, fue por su sueño, y al final de cuentas lo hizo realidad, ella quería a alguien que la acompañara hasta el último día de su existencia, y de acuerdo a las sorpresas que dá la vida, también lo logró.


FIN.

PARTE XIX

Andrés, estás seguro de que podrás con la responsabilidad del área de redacción de ese Estado, digo, no dudo de tu capacidad, pero hay gente que ha luchado por años para conseguir ese puesto y es gente local, y ya sabes como se ponen las cosas cuando un "chilango" vá a ocupar los puestos que ellos creen que son de su propiedad.
Pues entiendo mucho la postura de mis compañeros, para su tranquilidad señor, le comento, en varias ocasiones he estado por allá y me he ganado el aprecio de muchos de ellos si no es que de la mayoría, llegué a sondear la posibilidad de un cambio, incluso como reportero, pero cuando se lo mencioné a usted y me dijo que iba a quedar vacante la redacción, pues me apunté para ocuparla, y sé muy bien que si podré con eso, usted mismo se ha dado cuenta que en muchas ocasiones yo he sacado ese trabajo por diversas situaciones que se presentaron acá, y el trabajo no se compara, verdad?
Pues si, tienes razón, por eso te digo que no dudo de tu enorme capacidad, sin embargo no me deja de extrañar que te quieras ir a radicar definitivamente a esa ciudad, creo que el buen Andrés trae algo más entre manos.
Pues no se lo voy a negar señor, el motivo más importante es...una hermosa mujer.
Haberlo dicho antes mi amigo, así no debemos seguir con esta charla, a preparar sus cosas entonces, supongo que ya ha de haber hecho lo necesario para llegar a vivir por allá, y por supuesto, cuente con mi apoyo en todo lo que la empresa pueda ayudarle.
Pues si señor, me enteré que el departamento de los corresponsales cuenta con una habitación disponible, mientras me instalo definitivamente, podría utilizar esa recámara?
Claro que si Andrés, ordenaré que así sea, necesita algún tipo de menaje, sé que ese departamento está todo amueblado, vamos, en caso de necesitar algo para que se sienta cómodo, por favor haga las compras y facture a nombre de la empresa, veré que podamos ayudarlo también con eso.
Muchas gracias señor, en verdad me está apoyando mucho y se lo reconozco, salgo dentro de 15 días entonces, pondré todo en orden en mi puesto para dejarlo listo para Yañez, quien ocupará ese lugar.
Muy bien Andrés, pues felicidades en su nuevo proyecto y que si va en busca de la felicidad, la encuentre como usted la merece mi buen amigo, seguimos en contacto entonces.
Gracias señor, con su permiso.
Estaba hecho, el cambio autorizado y con algunas prestaciones que Andrés no había pensado que se le autorizaran, fue bueno mencionarle al jefe lo del motivo principal, bien se sabía en todo el ambiente lo enamorado que era su jefe, y pues eso fue lo que le ayudó para sacar incluso los gastos que habría que hacer.
Estaba ansioso esa noche, quería sorprenderla, en alguna ocasión él ya había mencionado su interés por cambiarse para allá, ella solamente le dijo que sería muy bueno, ya que podrían estar más tiempo juntos, y así quedaron las cosas.
Pero hoy ya estaba por cumplir ese sueño, seguramente ella se pondría felíz.
Hola guapo, como estás?...
Hola bonita, muy bien y felíz, sobre todo eso, felíz...
Pues que bueno, yo también me encuentro muy felíz, por fin se va a cumplir uno de mis sueños...
Como es eso, acaso ya sabes algo?..
Pues si, ya sé todo, recuerdas aquel mail que me enviaste donde ponías una caricatura y que decía, te extraño?...
Si, lo recuerdo, aunque ya no mencionaste nada de ese dibujo, no sé si te gustó o no...
Es que lo vio una persona, el mail, sin que yo me diera cuenta, y después de unos días, me propuso matrimonio, yo me extrañé ante su propuesta, en fin, al mes que me lo propuso vino para acá, para entregarme un anillo de compromiso, le presenté a mis hermanos, a mi papá y a la familia que debe conocer, estoy muy felíz Andrés...
Andrés no sabía ni que decir, era acaso una broma?
Laura, no estés jugando con eso por favor, yo estoy por dar un paso muy importante para ambos, ya te había mencionado lo de mi cambio de plaza...
No estoy jugando, acaso pensabas que estaría sola todo el resto de mi vida?...
Pues a eso me refiero Laura, mi cambio ya está listo, en 15 días más voy para allá, a vivir definitivamente...
Pero es que nunca me afirmaste nada, yo pensé que actuabas así para "mantenerme" en estado de espera para cuando quisieras venir o vernos y yo estar disponible, pero todo cansa Andrés, yo necesito de alguien que me cuide, alguien que quiera pasar una vida completa conmigo, y al fin lo encontré...
Se había quedado mudo, no alcanzaba a reaccionar, lo del cambio ya estaba hecho, que hacer, que hacer???...
Laura, en tan solo 15 días estaré allá...
Oye que bien, vienes de vacaciones o algo así?...
No Laura, voy a radicar allá, me concedieron el cambio...
Laura ahora fue la que no supo que decir, se quedó callada, pensando...
Yo te había dicho que eso podría ser una opción, lo recuerdas?...
Pero es que nunca lo mencionaste de manera veráz, yo pensé que solamente era algo imaginario para ti...
Pues es algo tan verdadero, que por eso es que lo digo, no fue nada fácil conseguirlo, no es algo como llevar un anillo y comprometerme contigo, porque esto para mi significa mucho más, o acaso el tipo ese vive allá y es por eso que accediste?...
No sé que decirte Andrés, tu sabes que eres el segundo hombre de mi vida, que estoy enamorada de ti, pero esta persona llegó y me ofreció algo que yo esperaba...
No puedo aceptar eso Laura, yo te propuse matrimonio en alguna ocasión....
Si, pero ya nunca más volviste a tocar el tema, pensé que eso ya no te interesaba...
Pues fue lo mismo que yo pensé de ti...
Andrés se daba cuenta de que el famoso "ruido" en la comunicación se había interpuesto una vez más, culpar a Laura, culparse a él, quien era el culpable de esto que estaba pasando?

PARTE XVIII

Pasaron 2 años con ese tipo de relación, en ese lapso Laura por fin pudo conseguir el divorcio, tuvo que sacrificar algunas cosas materiales pero eso no le importó mucho, por fin habia conseguido lo que durante tanto tiempo estuvo buscando, Andrés pensó que sería bueno después de un tiempo hacerle una propuesta más formal, pero un comentario de ella en uno de sus encuentros lo hizo dar marcha atrás, ella dijo, esta libertad no la voy a perder nunca más.
Ya no se ocultaban aún en la ciudad de ella, y menos si estaban fuera, dos citas como mínimo al mes les iba muy bien, se disfrutaban mucho, ambos aprendieron de ellos mismos, él le enseño muchas cosas que le eran desconocidas, la comunicación en todos los aspectos era fluída, claro que tenían sus discusiones pero siempre salían avantes, ya que el pacto era no permitir "ruido" en esa comunicación, que si algo no había quedado claro, lo plantearan y así solucionar las cosas.
Se veía una pareja enamorada todo pintaba como algo perfecto para ambos, como siempre ella no cuestionaba absolutamente nada, pero es que no había nada que cuestionar, sin embargo, Andrés en alguna ocasión si mencionó lo de formalizar su relación, ella simplemente se salió por la tangente, y pues el se quedó así, cómodamente establecido en ese amor que de todas maneras no dejaba de ser "ocasional", a pesar de manifestarse mucho amor a cada instante que podían, ya sea por la computadora, por teléfono, o en sus citas, Laura dió por terminada la relación en un par de ocasiones, y al paso de un mes o dos, ella lo buscaba y Andrés accedía a intentarlo de nuevo, asi fueron pasando los días, los meses y los años, se cumplieron casi 10 de vida de su romance, Andrés en ese tiempo estaba viendo la posibilidad de un cambio de lugar de trabajo, y las cosas iban por buen camino, no le mencionó nada a Laura, quería que fuera una sorpresa....una sorpresa.

PARTE XVII

Pasaron dos meses en que ya no fueron solamente los sábados de chateo, ella entraba por la noche y lo buscaba, Andrés estaba cada día más encantado por como se iban dando las cosas, y por fin Laura le comunicó que en un mes tendría un Congreso en la ciudad de Puebla, un fin de semana completito, llegaría desde el viernes 21 de marzo, ya que era un día festivo.
Y así de repente Andrés se vió viajando en un autobús, Puebla quedaba tan solo a un par de horas, iba muy nervioso, ese sentimiento de adolescente, se decía que su suerte estaba cambiando, que estaría con una chica en verdad lindísima, nunca antes, ni siquiera Lulú era tan hermosa, pero además le fascinaba su manera de ser para con él, nunca lo presionaba en nigún aspecto, bromeaba con él respecto a "sus" novias del chat, le decía que seguramente había más de 3 tras de sus huesos, etc.
El trayecto del Bus fue una eternidad, así como la primera vez que la vió, al llegar a la terminal tomó un taxi le indicó el nombre del hotel, ella no había querido hospedarse en el hotel sede, ya que Andrés le había sugerido que a través de photoshop se encargaría de hacerle un reconocimiento del Congreso eso con la finalidad de no separarse para nada en esos días.
Llegó a la recepción, preguntó por la habitación de ella, le dijeron que estaba en el cuarto piso, habitación 407, pasó al baño de la planta baja, se lavó los dientes, se peinó con agua y se puso un poco de loción.
Subió en el ascensor, tocó a la puerta del cuarto, ella abrió, su sonrisa iluminaba todo, pasó al cuarto y de inmediato Laura lo abrazó de tal manera y se dieron un enorme beso lleno de toda la pasión contenida por días, por semanas, por meses, por años, estaban ahi, dos personas que habían coincidido en muchos aspectos, por fin estaban realmente juntos, sin presiones, Laura demostraba que estaba cambiando en muchos aspectos, se besaron a cada instante no podían dejar de hacerlo, simplemente era como dos personajes que después de muchas generaciones se habían encontrado y reconocido, sentían los dos que ya antes habían estado juntos y desde entonces habían pactado volverse a encontrar en el tiempo y en el espacio, ese día por fin había llegado, los besos fueron subiendo de tono, las manos tocaban cada parte de sus cuerpos, la ropa empezó a estorbar, fueron ayudándose con lo que podían, quedaron desnudos, se vieron analizándose, se gustaron aun más, siguieron adelante con los preliminares, les encantaba eso, y en un momento Andrés estaba dentro de ella, al principio de una manera suave, lenta, tratando de disfrutar al máximo y hacerla disfrutar a ella aún más, tanto tiempo sin pareja por parte de ambos, eso se notaba, y sin embargo se acoplaron de tal manera que ese sentimiento de haber estado juntos en otra época, en otra vida, en otra era tal vez, se hacía como algo real, no salieron de la habítación sino hasta que oscureció, Andrés le dijo que era necesario comer algo, y así lo hcieron, fueron al restaurant del mismo hotel, parecía una pareja de recién casados, cuando no estaban abrazados iban tomados de la mano, salieron a caminar por el centro de la ciudad, había mucho movimiento en la calle, y ellos solamente tenían ojos para estarse mirando, besándose a cada paso, la gente los miraba, una pareja madura entregándose tanto amor, ellos solamente estaban viviendo cada instante que hoy tenían al fin, esa noche durmieron muy poco, la entrega era total, no dejaban nada de lado, deseo, pasión, ternura, él respiraba a traves de los poros de ella, la saboreaba, la olía, la tocaba, su piel era de seda, siempre se lo dijo, el sábado fue igual, ella tenía que regresar el domingo y él también, no querían pensar en el momento de separarse, sin embargo eso estaba latente, pero vivir el momento, esa era la consigna, sin embargo la noche del domingo llegó, en el taxi música de Roberto Carlos, que más se podía esperar?
Laura le dijo que se despidieran casi en las afueras de la terminal, porque no quería arriesgarse a que alguien la viera y corrieran a contarle a su marido alguna cosa, Andrés obedeció, se dieron un largo muy largo beso de despedida, hicieron la promesa de verse dentro de poco, en cuanto la oportunidad se presentara de nuevo, al verla caminar hacia la sala de espera de su autobús, Andrés estaba llorando, hasta cuando la volvería a ver, pensó en gritarle muy fuerte, pero se contuvo, solamente lo pensó, y le dijo....Te amo Laura.