El Fonógrafo

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martes, 24 de febrero de 2009

Inicios

Hoy me permito publicar un relato creado por mí. En realidad se trata de un reto que me propuso un buen amigo mío, a la par que buen escritor. El otro día, hablando de sus inicios en el mundo de la literatura, me contó brevemente cómo le había sucedido. Y, en el día de hoy al volver a hablar sobre el tema, le propuse el porqué no hacia un relato sobre ello. Y aquí vino el reto, me dijo: ¿Y por qué no lo escribes tu?.¿Yo?, pero si yo no estaba allí para poder narrarlo con precisión. No, no te pido que lo hagas. Solo quiero que crees tu propia narración basándote en lo que yo te relaté.

Y eso no fue lo peor, sino que en aquel mismo instante mi mente ya rebullía pensando en cómo hacerlo. Y, por esto mismo, a la par que conversaba con él, empecé a redactarlo. Hasta que tuve que decirle que mi silencio era debido a ello. Una vez terminado y casi sin tiempo para repasarlo, me pidió que se lo enviara. Y lo hice, no sin cierto temor. Su opinión ya me la brindó y ahora espero la vuestra. No temais a ser inclementes, porque ya dicen que de las críticas se aprende.

Inicios
"¿Cómo se inicia la afición a la lectura y posteriormente a escribir nuestros propios textos literarios? Este era el tema de la charla que tuve hace unos días con un buen amigo mío. Y él me contó la forma en que le sucedió.

De muy niño había tenido que ser ingresado en una clínica para someterse a una operación. ¿Qué tipo de operación? ¿Grave? ¿Leve?, bueno sea cual sea el motivo lo dejaremos como algo circunstancial.

Al llegar a la habitación, sus padres le dejaron en la mesilla, junto a la cama, unas manzanas chilenas y unas historietas de “Archie”. Aunque él no me lo dijo, supongo que su madre, al ver que se acercaba la hora en que tenían que abandonar el centro, le debía sugerir que leyera alguna. Y mi amigo así lo hizo y rápidamente se concentró en su lectura, riendo con las ocurrencias de los personajes.

Sus padres, discretamente le dijeron: "Adiós, que duermas bien hijo, no temas mañana regresaremos bien prontito para estar contigo". Pero mi amigo estaba tan enfrascado con la historieta que a buen seguro apenas oyó lo dicho.

Al cerrarse la puerta de la habitación, fue cuando mi amigo fue consciente de lo ocurrido: sus padres se habían ido. Y empezó a mirar con temor aquellas blancas paredes que le rodeaban y, por primera vez, al niño que estaba tendido, como él, en la cama de al lado. Y sintió miedo, ese miedo incontrolable que sentimos cuando no encontramos una explicación plausible ante lo que nos rodea y no tenemos una mano amiga que nos sosiegue.

El niño de al lado, adivinó rápidamente lo que estaba ocurriendo. Y, bajando de su cama, se acercó a la de él.

-¿Qué te ocurre?, hasta hace poco estabas riendo con tus cómics.
¿Ya no quieres seguir leyéndolos? Si quieres yo te presto los míos.


Mi amigo no decía nada, solo le miraba fijamente.

-¿Te ha comido la lengua el gato?

Mi amigo solo atinó a balbucear: No, es que….

-¿Que? Vamos, no tengas miedo, me han dicho que aquí a los niños nos dan unas ricas galletitas si nos portamos bien y somos valientes.
-Yo tengo mis manzanas chilenas ¿quieres una?

Luego mi amigo, más tranquilo, tomó uno de los cómics que su compañero le brindaba. Y volvió a sumergirse en un mundo muy lejano, lejos de aquella habitación, de aquellas cuatro paredes. Su imaginación le llevaba a viajar a lugares recónditos, se enfrentaba a monstruos y villanos con singular firmeza y valor.

Cuando llegó la hora, se cerraron las luces de la habitación. Mi amigo, por un momento, volvió a sentir el temor que le había acechado antes. Y se revolvió en su cama.

- Recuerda…galletitas.

Si, galletitas para los niños valientes. Y él lo era y se haria acreedor de ese trofeo.

A primera hora de la mañana, sus padres regresaron para estar con él antes de que lo llevaran a quirófano. En sus rostros se reflejaba que aquella noche, con su pequeño hijo fuera de casa, no habían podido dormir apenas. Pero en cuanto se acercaron a su cama y comprobaron que él aún dormía placidamente, una sonrisa se dibujo en su cara: su hijo era un valiente. Había superado con creces el temor a sentirse solo.

Mucho antes de ello, los enfermeros, con mucho sigilo, se habían llevado ya a su pequeño vecino a la sala de operaciones. Y, así fue que cuando vinieron a buscar a mi amigo, éste, se dio cuenta de que quizás no volverían a verse. Y, antes de abandonar la habitación, tomó todos sus cómics y los puso junto a los de su amigo, junto con una manzana chilena.

Desde aquel día, mi amigo, aprendió que en la vida siempre tenemos algo en que refugiarnos, algo que, como aquel amigo, nos da la paz, el sosiego, que tantas veces necesitamos, o, la fuerza para enfrentarnos a cualquier situación: UN LIBRO.

Y con el tiempo, no tan solo se convirtió en un ávido lector, sino que supo plasmar sus vivencias y sus fantasías en nuevos textos. (Y yo, por fortuna, he podido leer algunos de ellos)."

lunes, 23 de febrero de 2009

Instantes...de Jorge Luis Borges


Si pudiera vivir nuevamente mi vida

En la próxima, trataria de cometer más errores.
No intentaría ser tan perfecto, me relajaría más.
Sería más tonto de lo que he sido,
de hecho me tomaría muy pocas cosas con seriedad.

Sería menos higiénico, correría más riesgos.
Haría más viajes, contemplaría más atardeceres,

subiría más montañas, nadaría más ríos.

Iría a lugares donde nunca he ido,
comería más helados y menos habas.

Tendría más problemas reales y menos imaginarios.




Yo fui una de esas personas que vivió sensata y
prolíficamente cada minuto de su vida.
Claro que tuve momentos de alegría,
pero si pudiese volver atrás,
trataría de tener solamente buenos momentos.






Por si no lo saben, de eso está hecha la vida,
solo de momentos.
No te pierdas el ahora.

Yo era una de esos que nunca iba sin un termómetro,

sin una bolsa de agua caliente,
un paraguas y un paracaídas.
Si pudiese volver a vivir, viajaría más liviano.

Si pudiera volver a vivir, comenzaría a andar descalzo
a principios de la Primavera y seguiría así hasta
concluir el Otoño.

Daría más vueltas en calesita,
contemplaría más amaneceres y jugaría con niños.

Si tuviera otra vez la vida por delante.
Pero ya ven, tengo 85 años y sé que me estoy muriendo...




Pocas veces nos paramos a contemplar las pequeñas cosas
que nos rodean: cada día encierra muchos pequeños tesoros,
que pocas veces somos capaces de ver; siempre andamos
corriendo de un lado a otro, apenas prestando atención a
lo que nos rodea, dando más importancia a ese televisor nuevo,
o a los cientos de problemas del trabajo, de los pagos...


¿Invertiríamos tanto tiempo en los mismos asuntos o dando
importancia a tantos problemas (muchas veces imaginarios,
como reza el poema), si supiéramos cuándo nos iba a llegar
la hora?

Es de sabios fijarse en las pequeñas maravillas del día a día;
seamos sabios en nuestras vidas para disfrutar de la sonrisa
de nuestra pareja, de un rato de silencio, de
una lectura pausada, de un abrazo o un beso.

sábado, 21 de febrero de 2009

El amor más allá de la muerte


El hombre ha visto siempre en el amor, la esencia más compacta y palpable de la vida. Quizás por ello las fuerzas entre el amor y la muerte, sean una constante en la historia desde antes de los griegos.
Creo que todas las obras de arte son hijas de las fuerzas de ese duelo apasionado entre el amor y la muerte (P. Neruda) El gran amor entre Mumtaj Mahal y Shah Jahan será una lágrima de purísima blancura en el lienzo de la Eternidad (R. Tagore)dice la canción:"ne del shahenshah del ektaj del hasin del banwake mahal,apne del ko del duniya del saremohabatha ki nishandi de diTaj Majal""un rey Shahenshah ha capturado el amor más profundo para el suyo por su Princesa en un monumento,el Taj Mahal" La Begum Mumtaj Mahal, era de origen persa. Según la historia, fué la compañera inseparable del emperador Shah Jahan, el cual tenía muy en cuenta su opinión la cual solía ser acertada. Durante el segundo año de su reinado, la emperatriz enfermó de gravedad en el parto de su hijo 14. Una noche, Shah Janah, abatido, se inclinó sobre la moribunda y le dijo con lágrimas en los ojos: ¿cómo puedo demostrarle al mundo cuánto te amo Mumtaj? Con voz débil, ella le respondió que construyéndole una tumba única y hermosa... ¿Qué más podré hacer para decirte, mi querida Mumtaj, que nada llenará el vacío que me has dejado? ¿qué puedo ofrecerle al tiempo para que vuelva a darme la oportunidad de decirte cuánto te amo?De una manera u otra deberé atrapar la luna. Tengo que tomarla del cielo para poder decirle que he conocido a alguien más bella que ella, aunque la pierda como testigo de nuestras noche juntos...Tú, Mumtaj, seguirás siendo mía yá que te llevo dentro de mí. Debo seguir diciéndote cuanto te extraño y debo hacerlo de una manera eterna. Con delicadeza, como tus besos. Con precisión, como tus abrazos. Con la simetría de nuestros cuerpos, tan unidos como el cielo sobre el mar.
Me has dado tu cuerpo muchas veces, me han dejado saberte de memoria: tu voz, tus ojos, la fuerza de tu útero, tus gritos de madre fuerte... de leona hasta el final. Y ahora te tengo aquí, callada para siempre, a oscuras dentro de mi oscuridad y recordándome lo que siempre somos: pasajeros breves en un túnel de una sola salida, necesitados de perdurar en la memoria de alguien, intentando plasmar la inmortalidad de una perla que nadie posee...el Taj Majal.
Mi querida compañera de siempre, sólo me has dejado tu olor de mujer, repleto de jazmines, aromatizado de sándalo. Me encargaré de guardar el reflejo de tus ojos en bloques de malaquita, trozos de madre perla, lágrimas de lapislázuli, jade, coral, turquesa y amatista.
Le robaré los colores a la naturaleza para construir tu imagen, lo haré¡ ...Pediré que comiencen a guardar rayos de luna para que representen tu piel, la delicadeza de tus pasos. Así lo haré: ¡ Inshalah ¡ Nunca pensé que tu partida me doliera tanto, me tapo los oídos porque el viento sigue trayéndome tu canto y me tapo la boca porque no quiero que nadie me escuche llorar.
Mi Mumtaj Mahal, mi Compañera de siempre, ¿cómo llenar tu ausencia? La llenaré dándole al mundo una pequeña muestra del inolvidable y gran amor que tú me has dado...- Shah Jahan - Bajo la luna llena, el Taj parece brillar intensamente. Es un hermoso santuario de mármol blanco prístino y de magnificente serenidad, ni las palabras, ni la pintura, pueden dar una idea de su imponente belleza, calma, paz, sencillez, majestuosidad...libre de la cárcel del tiempo.
Cada visitante del mausoleo quiere llevarse a toda costa del lugar un "souvenir inmortal" en una fotografía, mientras...paseando descalza por sus mármoles, yo pienso en la Princesa Mumtaj y en su rapsodia de amor eterno, que gracias al mausoleo del Taj Majal, venció sobre la muerte y el olvido.

viernes, 20 de febrero de 2009

"Madre Lola"


Cuando la calle duerme y el sol
no ha levantado todavía el vuelo,
madre Lola
ya anda arriba y abajo,
con el ultimo bostezo
en la garganta,
haciendo el desayuno para el marido,
sacando los hijos de la cama
para que vayan a la escuela.
Empieza el día para ella y el sol
no ha levantado todavía el vuelo.

Es necesario hacer muchos números,
es necesario tener memoria
para llegar a fin de mes.
Para madre Lola
nadie escribe la historia,
es poca cosa, casi nada.

Mira los árboles del paseo
mientras se llena el lavadero.
Madre Lola...
Ay, si por un momento pudiera,
ni hacer ni pensar nada,
e irse sola.

Pero su sueño siempre se pierde
hacia arriba por el patio,
dejándole un montón de ropa,
mientras la gente anda por el paseo
y se va llenando el lavadero.

Cuando la calle duerme y el sol
ya ha escondido su vuelo,
madre Lola
se seca por fin las manos,
ya duermen los niños.
Y madre Lola
se desnuda a los pies de la cama,
ella sabe que su marido
está acostado y espera a su mujer.

Si Dios quiere mañana todo irá mejor,
todo le parece bien.
Pero... todo le parece bien,
pero...

miércoles, 18 de febrero de 2009

LA LUNA (SABINES)


La luna se puede tomar a cucharadas
o como una cápsula cada dos horas.
Es buena como hipnótico y sedante
y también alivia
a los que se han intoxicado de filosofía.

Un pedazo de luna en el bolsillo
es mejor amuleto que la pata de conejo:
sirve para encontrar a quien se ama,
para ser rico sin que lo sepa nadie
y para alejar a los médicoas y a las clínicas.

Se puede dar de postre a los niños
cuando no se han dormido,
y unas gotas de luna en los ojos de los ancianos
ayudan a bien morir.

Pon una hoja tierna de la luna
debajo de tu almohada
y mirarás lo que quieras ver.

Lleva siempre un frasquito del aire de la luna
para cuando te ahogues,
y dale la llave de la luna
a los presos y a los desencantados.

Para los condenados a muerte
y para los condenados a vida
no hay mejor estimulante que la luna
en dosis precisas y controladas.

martes, 17 de febrero de 2009

Muere lentamente...




Muere lentamente quien se transforma en

esclavo del hábito, repitiendo todos los días

los mismos trayectos, quien no cambia de marc
a,

no arriesga el vestir un color nuevo y no le habla


a quien no conoce.

Muere lentamente quien hace de la televisión

su gurú.


Muere lentamente quien evita una pasión, quien

prefiere el negro sobre el blanco y los puntos sobre

las "ies" a un remolino de emociones, justamente

las que rescatan el brillo de los ojos, sonrisas de

los bostezos, corazones a los tropiezos y

sentimientos.

Muere lentamente quien no voltea la

mesa cuando está

infeliz en el trabajo, quien no arriesga

lo cierto por lo

incierto para ir detrás de un sueño,

quien no se permite

por lo menos una vez en la vida, huir

de los consejos sensatos.

Muere lentamente quien no viaja, quien

no lee, quien no

oye música, quien no encuentra gracia

en si mismo.

Muere lentamente quien destruye su amor

propio, quien

no se deja ayudar.

Muere lentamente, quien pasa los días

quejándose de su

mala suerte o de la lluvia incesante.

Muere lentamente, quien abandonando

un proyecto

antes de iniciarlo, no preguntando de

un asunto que

desconoce o no respondiendo cuando

le indagan sobre

algo que sabe.

Evitemos la muerte en suaves cuotas,

recordando siempre

que estar vivo exige un esfuerzo mucho

mayor que el simple

hecho de respirar.

Solamente la ardiente paciencia hará

que conquistemos

una espléndida felicidad.

Autor: Pablo Neruda

domingo, 15 de febrero de 2009

Piernas (Benedetti)

Las piernas de la amada son fraternas
cuando se abren buscando el infinito
y apelan al futuro como un rito
que las hace más dulces y más tiernas

pero también las piernas son cavernas
donde el eco se funde con el grito
y cumplen con el viejo requisito
de buscar el amparo de otras piernas

si se separan como bienvenida
las piernas de la amada hacen historia
mantienen sus ofrendas y enseguida
enlazan algún cuerpo en su memoria
cuando trazan los signos de la vida
las piernas de la amada son la gloria.

viernes, 13 de febrero de 2009

En el 25º aniversario de su muerte, un recuerdo de Julio Cortázar: el fragmento más recordado de Rayuela



Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.


Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.

martes, 10 de febrero de 2009



Todo lo que existe en nuestras vidas, todo lo que hemos creado a nuestro alrededor, es simplemente un reflejo de lo que llevamos dentro.
La intimidad forma parte de nuestras necesidades esenciales, sin ese privado y sagrado espacio de creencias, pensamientos, sueños, proyectos que nos constituyen como seres únicos nos sentimos como amputados de nosotros mismos.
La claridad con la que seamos capaces de percibir nuestra vida y lo que ocurre en ella, es factor fundamental para nuestro bienestar interior.
Para estar bien con otra persona, necesitamos estar bien con nosotros mismos.
De eso se trata la intimidad, de conocernos íntimamente, internamente, honestamente.
Se trata de poder mirarnos al espejo y reconocernos y aceptarnos tal como somos.
No se escuda ni en el pasado ni en el futuro, puede percibirse como algo que nos gusta o que nos disgusta, nos revela realmente quienes somos; deja al descubierto nuestras heridas emocionales, temores y resistencias.
Para poseer una intimidad, se debe estar dotado de un "si mismo".
Necesitamos ser reconocidos como persona.
No es en la superficialidad donde el ser humano se distingue de sus semejantes, sino en la intimidad: el ser humano vale lo que vale su intimidad.
Descubrirnos en la dimensión personal requiere conocer cada vez mejor la propia intimidad.
Descubrirse a los demás en esta misma dimensión implica ser capaz de comunicar la intimidad a otros.
Ambas cosas resultan más fáciles en el clima natural de la intimidad que es la familia, como centro de intimidad.
Ello se debe a que lo biológico se hace biográfico.

Aunque nuestros corazones anhelan la intimidad, aunque nuestras mentes entienden nuestra profunda necesidad de intimidad, la revelación de nosotros mismos que esta exige es a menudo algo que nos intimida demasiado.
Compartir el propio ser completamente, sin límites, deja al desnudo el profundísimo temor a ser rechazado por ser quienes somos.
Significa compartir los secretos de nuestros corazones, mentes y almas con otro ser humano imperfecto y frágil.
Exige que le permitamos a otra persona descubrir qué nos moviliza, qué nos inspira, qué nos impulsa, qué nos obsesiona, hacia dónde corremos y de qué huimos, qué enemigos autodestructivos yacen dentro de nosotros y qué sueños locos y maravillosos albergamos en nuestros corazones.
Esta pertenece al individuo y a su interioridad, y también a los territorios que construye a lo largo de los años, pareja, familia, ya que La Intimidad, es la que entreteje el vinculo que lo une a su entorno, a sus "íntimos", pareja, hijos, parientes, amigos.
Para la intimidad, las relaciones son procesos, no productos acabados y perfectos.
La intimidad necesita tiempo y espacio para crecer, implica estar ahí con la otra persona, estando presente tanto física como mental y emocionalmente, ambos durante la conversación y el silencio.
Somos afortunados si experimentamos solo tres horas de auténtica intimidad en toda nuestra vida.
Podemos desarrollar intimidad con nosotros mismos de la misma manera que lo hacemos con otras personas, al ser honestos, comunicarnos claramente y permitirnos tiempo y espacio para estar a solas con nosotros mismos.
Una vez que logramos intimar con nosotros mismos, aprendemos a aceptarnos por lo que somos, y nos sentimos lo suficientemente cómodos como para relajarnos y permitirnos fluir libremente con lo que sentimos, para expresarlo armónicamente, y establecer una conexión con la otra persona que nos permita conectarnos íntimamente.
Cuando nos compenetramos lo suficiente con otra persona para permitirnos decirle exactamente como nos sentimos, le ofrecemos un puente que puede permitirle conocernos mejor.
Los puentes se cruzan en ambos sentidos, y eso nos permitiría conocer mejor a la otra persona también.
Es importante recordar que no podemos intimar con otra persona, más de lo que somos capaces de intimar con nosotros mismos.
¿Cómo podemos esperar que alguien sepa como nos sentimos si nosotros mismos no lo sabemos? Es importante mantener siempre presente que nadie nos puede dar lo que no tenemos, ese es un trabajo que nos toca realizar a nosotros mismos.
Si sentimos que hay algo que nos falta, e intentamos encontrarlo en otra persona, lo único que encontraremos será la decepción.
Y no podía ser de otra manera pues simplemente estaremos viendo el reflejo de lo que llevamos dentro.

El amor comienza cuando la necesidad termina. María Inés

sábado, 7 de febrero de 2009

" Ayer soñé que podía y hoy puedo "


" Ayer soñé que podía y hoy puedo "


Como los budistas, sé que la palabra no es el hecho, si digo manzana no es la maravilla innombrable que enamora el verano, si digo árbol apenas me acerco a lo que saben las aves, el caballo siempre fue y será lo que es sin saber que así lo nombro.
Sé que la palabra no es el hecho, pero sí que un día mi padre bajó de la montaña y dijo unas palabras al oído de mi madre, y la incendió de tal manera que hasta aquí he llegado yo, continuando el poema que mi padre comenzó con algunas palabras.
Nacemos para encontrarnos (la vida es el arte del encuentro) encontrarnos para confirmar que la humanidad es una sola familia y que habitamos un país llamado Tierra.
Somos hijos del amor, por lo tanto nacemos para la felicidad (fuera de la felicidad son todos pretextos), y debemos ser felices también por nuestros hijos, porque no hay nada mejor que recordar padres felices.
Hay tantas cosas para gozar y nuestro paso por la Tierra es tan corto, que sufrir es una pérdida de tiempo.Además, el universo siempre está dispuesto a complacernos, por eso estamos rodeados de buenas noticias..
Cada mañana es una buena noticia, cada niño que nace es una buena noticia, cada cantor es una buena noticia porque cada cantor es un soldado menos, por eso hay que cuidarse del que no canta porque algo esconde.
Eso lo aprendí de mi madre que fue la primera buena noticia que conocí.
Se llamaba Sara y nunca pudo ser inteligente porque cada vez que estaba por aprender algo llegaba la felicidad y la distraía, nunca usó agenda porque sólo hacía lo que amaba, y eso se lo recordaba el corazón.
Se dedicó a vivir y no le quedaba tiempo para hacer otra cosa.
De mi madre también aprendí que nunca es tarde, que siempre se puede empezar de nuevo, ahora mismo le puedes decir basta a la mujer que ya no amas, al trabajo que odias, a las cosas que te encadenan a la tarjeta de crédito, a los noticieros que te envenenan desde la mañana, a los que quieren dirigir tu vida, ahora mismo le puedes decir basta al miedo que heredaste, porque la vida es aquí y ahora mismo.

Me he transformado en un hombre libre (como debe ser), es decir que mi vida se ha transformadoen una fiesta que vivo, en todo el mundo, desde la austeridad del frío patagónico a la lujuria del Caribe, desde la lúcida locura de Manhattan al misterio que enriquece a la India, donde la Madre Teresa sabe que debemos dar hasta que duela.
Caminando comprobé que nos vamos encontrando con el otro, lenta, misteriosa, sensualmente, porque lo que teje esta red revolucionaria es la poesía.
Ella nos lleva de la mano y debajo de la luna hasta los últimos rincones del mundo donde nos espera el compinche, uno más, el que continúa la línea que será un círculo que abarcará el planeta.
Esta es la revolución fundamental, el revolucionarse constantemente para armonizar con la vida, que es cambio permanente, por eso nos vamos encontrando fatalmente para iluminar cada rincón.
Que nada te distraiga de ti mismo, debes estar atento porque todavía no gozaste la más grande alegría ni sufriste el más grande dolor.
Vacía la copa cada noche para que Dios te la llene de agua nueva en el nuevo día. Vive de instante en instante porque eso es la vida.
Me costó 57 años llegar hasta aquí, cómo no gozar y respetar este momento? Se gana y se pierde, se sube y se baja, se nace y se muere. Y si la historia es tan simple, porqué te preocupas tanto? No te sientas aparte y olvidado, todos somos la sal de la Tierra. En la tranquilidad hay salud, como plenitud dentro de uno. Perdónate, acéptate, reconócete y ámate, recuerda que tienes que vivir contigo mismo por la eternidad, borra el pasado para no repetirlo, para no abandonar como tu padre, para no desanimarte como tu madre, para no tratarte como te trataron ellos, pero no los culpes porque nadie puede enseñar lo que no sabe, perdónalos y te liberarás de esas cadenas.
Si estás atento al presente, el pasado no te distraerá, entonces serás siempre nuevo. Tienes el poder para ser libre en este mismo momento, el poder está siempre en el presente porque toda la vida está en cada instante, pero no digas no puedo ni en broma porque el inconsciente no tiene sentido de humor, lo tomará en serio y te lo recordará cada vez que lo intentes.
Si quieres recuperar la salud abandona la crítica, el resentimiento y la culpa, responsables de nuestras enfermedades.
Perdona a todos y perdónate, no hay liberación más grande que el perdón, no hay nada como vivir sin enemigos. Nada peor para la cabeza y por lo tanto para el cuerpo, que el miedo, la culpa, el resentimiento y la crítica que te hace juez (agotadora y vana tarea) y cómplice de lo que te disgusta.
Culpar a los demás es no aceptar la responsabilidad de nuestra vida, es distraerse de ella.
El bien y el mal viven dentro tuyo, alimenta más al bien para que sea el vencedor cada vez que tengan que enfrentarse.
Lo que llamamos problemas son lecciones, por eso nada de lo que nos sucede es en vano.
No te quejes, recuerda que naciste desnudo, entonces ese pantalón y esa camisa que llevas ya son ganancia.
Cuida el presente porque en él vivirás el resto de tu vida.
Libérate de la ansiedad, piensa que lo que debe ser será, y sucederá naturalmente...


Facundo Cabral

domingo, 1 de febrero de 2009